domingo, 6 de diciembre de 2015

Los límites de la esperanza.

Como hemos estado viendo durante la andadura del blog, la mente, en su importante actividad propioceptiva e íntima, genera expectativas. Y ello ocurre indefectiblemente en una mente saludable. Estas expectativas pueden ser conscientes, pero en gran medida son subconscientes y conforman un pilar de la esperanza, la cual es un timón infalible para el ser humano, y la carencia de la misma puede relacionarse con patologías o dolencias en general.
Cuando optamos por un camino vital o una técnica de optimización integral, como la expuesta en el blog, podemos crearnos unas expectativas desmedidas y tener una esperanza exagerada. Obviamente, existen los límites que nos marca la naturaleza. Evidentemente, al mejorar nuestras creencias subconscientes modificamos nuestro entorno merced al cambio de nuestras interacciones con el mismo. Pero este cambio no es siempre a mejor, al menos en la forma en que nos lo imaginamos o lo esperamos cuando no hemos iniciado el camino. No obstante, lo que sí vamos a generar es una mejora personal integral. Dicho de otro modo: nuestra mejora no nos hace encontrar aquello que esperábamos vivir cuando empezamos a mejorarnos.
Además de lo anterior es importante remarcar que la mejora en el subconsciente debe tener un correlato en lo consciente, porque debemos enfocarlo integralmente y porque, en definitiva, ninguna técnica es todopoderosa.

domingo, 1 de noviembre de 2015

Per se.

Se suele decir que la práctica de la meditación zen es un fin en sí mismo y no un medio. De hecho, los grandes maestros evitan enfocar la guía de su práctica al satori o iluminación y prefieren localizar su labor en la meditación por sí misma. En este sentido cabría situar a la oración consciente. Ambas prácticas son en sí misma un valor y se buscan independientemente del beneficio que a nuestro ego (entendido como la suposición de lo que somos en función a aspectos aprendidos y/o automatizados) le pueda propiciar.
Por ello, incardinar en nuestra vida prácticas holísticas, independientemente de su profundidad o connotación espiritual y religiosa, ha de ser un fin en sí mismo, y en este sentido debe situarse el método expuesto en el blog, sea per se o aplicado. Acercarnos a la acción metódica de entrar armónicamente en nuestro subconsciente y reprogramarlo en la línea de lo ético, lo constructivo, sano y hasta salvífico, o aplicar este acceso a reforzar, meditar, relajarnos u otro cualquier sentido, ha de ser algo íntimo, reconfortante y luminoso. Cualquier otra sensación debería llevarnos a plantearnos en qué punto de dicha práctica estamos errando.

martes, 6 de octubre de 2015

¿Inmunes?

Es de todos conocido el efecto placebo, pero no está del todo divulgada la extensión que dicho fenómeno entraña. La asunción de que la creencia en que una sustancia inocua puede sanar o mitigar una enfermedad o dolencia conlleva plantearnos la extensión del concepto cotidiano de mente. La ciencia admite tal fenómeno, pero es cuidadosa a la hora de asumir este efecto de modo aislado, sin contar con la mentalidad, ánimo, circunstancias concomitantes, etcétera.
En una línea muy parecida al efecto placebo podemos hablar de la hipnosis terapéutica, per se o como instrumento.
Extendiendo todo lo mencionado podemos hablar del efecto nocebo, esto es, una idea que realiza una acción similar al efecto placebo, tanto sanando como enfermando. Y esto sí que está más presente, no sin razón, en el acervo popular. En efecto, los pensamientos estresantes, mayoritariamente de naturaleza subconsciente, provocan un efecto devastador en el organismo y, sin lugar a dudas, pensamientos de contenido opuesto pueden provocar un efecto contrario.
Habría un tercer fenómeno que no quisiera dejar de mencionar y es el de la remisión espontánea. Se entiende por tal la curación inexplicable de una enfermedad, por lo general de índole grave, no atribuible al tratamiento o la propia evolución de la dolencia. Es algo harto infrecuente y en lo que concurren posiblemente una panoplia de factores que imposibilitan hacer afirmaciones categóricas científicamente hablando.

El efecto placebo, el nocebo y la remisión espontánea nos dibujan un escenario en el que podemos caer en la tentación de atribuir a la mente un poder omnímodo en el resto del organismo. Realmente existen métodos -aparte del tratado en este blog- que nos inducen a pensar en esta posibilidad, pero la prudencia nos aconseja vivamente no dejarnos seducir por algo tan arriesgado, y sí asumir que podemos adquirir una buena actitud hacia todo lo que nos venga gracias a ellos.


domingo, 6 de septiembre de 2015

Aplicaciones del método (II)

El método, en su más íntima expresión, puede servir de complemento, ayuda o refuerzo a un amplio rango de actividades terapéuticas e introspectivas.


  1. Técnicas de saciación: la saciación, tanto en su perspectiva conductista como cognitiva, consiste básicamente en repetir una conducta disruptiva, lesiva, maniática o dañina lo suficiente como para que ya no signifique nada para nosotros. El método nos puede ayudar a recrear dicha conducta o a reforzar la técnica a través de los propósitos.
  2. Desensibilización sistemática: se trataría de recrear situaciones a las que tenemos fobias para, de un modo progresivo, ir desmontándolas. Trabajando con propósitos crecientes podremos ayudar a dicha técnica.
  3. Implosión: este método consiste en enfrentar a una persona de un modo real y físico a aquello que le provoca fobia. Trabajar con propósitos en el método puede ser más que suficiente, y al aplicar esta técnica va a resultar de gran ayuda.
  4. Entrenamiento autógeno: ya quedó explicado de forma somera, pero completa, este gran método de relajación, introspección, meditación y modificación del subconsciente. A través de solicitar permiso y coordinar propósitos podremos enriquecer esta práctica.
  5. Visualización: tanto la visualización estándar, relajante, creativa, introspectiva o meditativa, pueden ser mejorada a través de la solicitud de permiso y los propósitos.

miércoles, 12 de agosto de 2015

Joven para siempre. Perpetuos adolescentes.

Es algo común y extendido que todos queramos sentirnos siempre jóvenes. Pero, ¿por qué? Probablemente porque es un periodo de la vida que se caracteriza por:


  • Buena salud.
  • Desarrollo hormonal.
  • Descubrimiento asombrado del mundo.
  • Limpieza y claridad en los sentimientos.
  • Sueños, aspiraciones e ilusiones.


Junto a estas características cabría hacer unas distinciones sobre la juventud:

La juventud recordada: con el paso de los años se suelen contemplar el periodo juvenil con añoranza, pero debemos partir de que los recuerdos se actualizan en función de quiénes somos y cómo nos conceptualizamos ahora. Ello no implica que no haya un poso de verdad, pero, desde luego, el componente emocional se renueva y repiensa. Como reza el título de un mítico álbum de Wim Mertens, "Épica que nunca fue".

La juventud anhelada: es un lugar ajeno a nosotros, en nuestra mente, donde proyectamos todo aquello que creemos que nos falta o deseamos con fervor, por mitificación o pura necesidad. Ello está presente no solo en una época de la vida, sino en un lugar (Arcadia, Shangri-La).

La juventud perdida: es una versión negativa de lo anterior, consistente en arrepentirnos de cosas que hicimos u omitimos en aquellos años.

Una consideración particularmente importante de la juventud la podríamos denominar los perpetuos adolescentes, esto es, personas que siguen portándose y actuando de manera inmadura (egoísmo, egocentrismo, egotismo, superficialidad, inadaptación, falta de resiliencia, incapacidad para el compromiso, falta de perspectiva social...) independientemente de la edad. Estas personas son como quinceañeros en la piel de adultos. Todos conocemos casos así. Se quedaron en los quince años y así pasen cuarenta más siguen sin moverse de la casilla, incluso desde un punto de vista estético.

Realmente buena parte de las características de la juventud andan sepultadas bajo las creencias paralizantes y solo nos hace falta cambiar estas creencias para que salgan a flote. Pero, al mismo tiempo, no podemos obviar lo antes expresado sobre la madurez. Ser joven es un estado de la mente, pero solo una vez se tienen quince años.

domingo, 12 de julio de 2015

El insight.


El insight se refiere a la capacidad de ver en nosotros nuestros sentimientos, pensamientos, sensaciones y cogniciones. Se trata de una habilidad muy importante para todos y que exige su práctica, que es bien sencilla, pero exige cierta constancia, la cual –claro está – puede ser ayudada por el método aquí expuesto.
La manera de encontrar en nosotros puede ser propioceptiva (notar la reacción en nuestro cuerpo, nuestras cogniciones, nuestras sensaciones a través de las tres vías que ya vimos en la entrada de la PNL visual, auditiva y kinestésica) y/o cognitivo-verbal (qué siento, qué pienso, qué me molesta…).
El insight nos va a ser muy útil a la hora de empatizar con nosotros mismos en todo momento, esa coherencia y autenticidad de la que habla C. Rogers, ese ser uno con la experiencia de la que habla el Zen . Pero, también, esa coherencia nos va a llevar a empatizar más con los demás, a establecer una relación auténtica, sincera y dinámica, a la compasión en el sentido budista del término (sentir con).

Junto a ello el insight nos va a ser útil a la hora de afinar los propósitos a formular para reestructurar nuestra programación subconsciente.

domingo, 14 de junio de 2015

Revisando el método.

Revisando el método.

Inicio: para lograr la coherencia entre hemisferios, armonía, atención, equilibrio y tranquilidad que nos proporcionen un acceso a un estado de “atenta duermevela” (ondas theta) cruzamos nuestras piernas y unimos nuestras manos. Conviene que la espalda esté relajadamente recta. Para ello nos sentamos sobre el periné. Nos relajamos unos segundos en esa postura.

¿Y cómo cruzamos los pies? Verificando a través del teste cuál acepta nuestro subconsciente (▼)


 Pedimos permiso a nuestro subconsciente y cuando notemos una sensación particular de aceptación esperamos unos segundos y pasamos a la siguiente fase.


Iniciamos la repetición del propósito. Si nos distraemos volvemos sin forzar hasta la repetición. Cuando se integre el propósito sentiremos una sensación determinada (visual, cinestésica o auditiva). Nos quedamos en ella unos segundos.


Terminamos la integración del propósito, uniendo las manos en función en posición orante con la sensación del punto anterior, unos segundos.



Damos gracias a nuestro subconsciente y salimos con calma.

Sobre los propósitos:

Formulaciones en positivo (al menos al principio para tratar de redefinir nuestra arquitectura subconsciente) en función de lo que necesitamos pensar de nosotros mismos y/o el mundo. Podemos testar muscularmente dicho propósito al estilo propugnado, entre otros, por el Psych-K. (▼) Parten de qué queremos de nosotros mismos, qué necesitamos, cuándo nos ponemos tensos, qué nos agobia, qué nos disgusta, cuál es el obstáculo que veo... (▼) 


Trabajar al menos dos o tres días un propósito, aunque esto va a depender de muchos factores. Practicamos una o dos veces al día.


Cuando el propósito esté definitivamente conseguido pasamos a otro. Podemos verificar su consecución a través del test muscular (▼) aunque no es fundamental. Esta consecución nos abre la puerta, con frecuencia, a nuevos propósitos, pues muchos objetivos precisan, para ser alcanzados, varias reformulaciones subconscientes.


Reforzar lo que hemos hecho usando de vez en cuando propósitos de refuerzo como "todo lo conseguido se afianza en mí cada día más”.


El tiempo corre a nuestro favor, esto es, una vez integrado el propósito con el paso del tiempo se va haciendo más fuerte en nosotros. Cuando hayamos llegado a un punto en el que no encontremos propósitos reforzamos diariamente como se indica anteriormente.

(▶︎) Testar una afirmación:


Para verificar que una afirmación esté integrada en el subconsciente podemos testarlo. Ponemos los dedos como en las fotos de abajo. Una mano o un dedo hace fuerza sobre el otro tan fuerte como se pueda ( sin exagerar tampoco). Se realiza una afirmación cierta (p.ej.: “Me llamo…”) y se ejerce fuerza. Ese es el estado de aceptación. Luego se realiza una afirmación falsa y se ejerce fuerza. Ese es el estado de negación. A partir de ahí puede testarse la afirmación para ver si ha sido aceptada subconscientemente.
Este tipo de test se basa, como se ha visto a lo largo del blog, en la armonía mente-cuerpo y la expresión física de la actividad mental en su totalidad.




  






domingo, 31 de mayo de 2015

¿Pionero o prisionero?

Tomar conciencia de cómo nuestro subconsciente opera o por qué opera de la forma en que lo hace, es una labor que exige una concentración y una atención muy intensas. No obstante, es importante darse cuenta de que cuanto más actúa el subconsciente menos atendemos a lo que hace o, dicho de otro modo, cuando realizamos actividades cotidianas de cualquier tipo, o reaccionamos de la forma habitual, el subconsciente es el director de orquesta omnímodo. A la inversa, cuando más novedosa es la situación o cuando reaccionamos de una forma diferente, el subconsciente se halla más limitado y nuestro consciente toma protagonismo.
Por extensión de todo lo anterior,  proponer una respuesta, reacción o valoración novedosas a una situación cotidiana nos va a desvelar parte de los mecanismos subconscientes y, quizás, un esbozo del origen del pensamiento automático que se activaba antes.
El método aquí descrito nos va a facilitar enormemente eso y, además, nos va a presentar un mundo nuevo, en el que las creencias limitantes y dañinas son corregidas por otras que nos facilitan una nueva interacción.

"Cada vez que estés tentado de reaccionar de la misma vieja forma, pregúntate si quieres ser un prisionero del pasado o un pionero del futuro" (Deepak Chopra).

domingo, 10 de mayo de 2015

El peso de la conciencia.

Decía Marco T. Cicerón: "Mi conciencia tiene para mí más peso que la opinión de todo el mundo", y es así como debería ser para todos.
A lo largo del camino que lleva este blog recorrido (casi dos años) hemos estado viendo cómo se genera esa conciencia, cómo se arma la arquitectura subconsciente, que tan responsable es de lo que vemos, lo que vivimos y cómo lo hacemos. Pero, igualmente hemos visto que lo consciente nos da un margen de acción en el que tomamos nuestras decisiones, y cómo también con nuestro cuerpo en su totalidad es cómo vivimos y sentimos la vida.
Nada más fácil que psicopatizar a una sociedad, hacernos inmunes a escucharnos, vallar el insight (del que se hablará más adelante) y de, en definitiva, convertir al grupo humano, esa unión natural y comunión de seres entre sí, consigo y con el entorno, en una masa. Y es que el miedo, el embrutecimiento, el aislamiento, el consumismo y la cosificación (propia y ajena) hacen de la comunidad una masa manipulable. Llegamos así a la triste situación de que vivimos para las expectativas de los otros, por no haber podido encontrar las propias.
El método expuesto en este blog, y otros tantos,nos armonizan con nosotros mismos, nos ayudan a ser conscientes de qué barreras hay que quitar para vivir mejor y son útiles para escuchar nuestra propia conciencia, lo cual, por ende, es un quehacer para toda la vida; de forma individual, pero con un sentido colectivo.

domingo, 19 de abril de 2015

Acción y hábito.

Nuestros hábitos pesan y son una vía para conocer nuestro interior, pues suponen una expresión de lo subconsciente y reafirman, a través de acciones repetidas, formulaciones subconscientes, creando un bucle a través de la retroalimentación.Así se crea una segunda naturaleza en nosotros. Ejemplo de ello pueden ser las artes marciales, que en muchos casos buscan crear patrones de respuesta motriz automáticos.
En este sentido la práctica del método es esencial, y una vez alcanzados los objetivos propuestos y a la espera -si llegan- de otros nuevos, la práctica diaria del refuerzo nos ayuda a que penetren y se extiendan en nuestra estructura subconsciente y mejoran nuestra práctica.

jueves, 2 de abril de 2015

¿A que no eres capaz?

Con estas palabras como cebo todos hemos acabado haciendo, en algún momento de nuestra vida, algo que considerábamos una estupidez. Esto ocurre de forma significativamente frecuente en la adolescencia, pero ello no implica que suceda siempre así. De hecho, la superación cronológica y hormonal de dicha etapa no implica que hayamos madurado afectivamente, pudiendo encontrarnos con adultos que funcionan casi como púberes.
El mecanismo de este reto es relativamente simple: provocar una aceptación de las normas de un grupo y, por ende, de nuestro rol en él, enfrentándonos a un desafío. La cosa empieza a enrevesarse cuando esta acción no coincide con esa época de nuestra vida de afirmación social, búsqueda de la propia identidad, influencia del grupo de iguales y de aspiración a la homeostasis hormonal, que es la adolescencia. En efecto, en el trasfondo de dicho comportamiento radica lo afectivo, lo límbico, lo subconsciente. Asumir este lance implica nuestra incapacidad de valorarnos por lo que somos, por lo que sentimos y merecemos, por nuestra inmensa validez intrínseca como seres humanos, y ello se ancla en la programación subconsciente.

domingo, 15 de marzo de 2015

Completar.

La labor de mejorar nuestra arquitectura subconsciente no parece ser sencilla, per se y por la vinculación sistémica de todo nuestro ser y el entorno, el objetivo y el percibido y el contexto biográfico-histórico. El método planteado en este blog nos da la clave de cómo acceder a ese software, aunque podemos reforzar este trabajo con técnicas complementarias. Estas vías complementarias deben ser preferentemente de índole consciente, ya que el trabajo a nivel subconsciente es el fuerte de este método. Algunas de ellas pueden ser técnicas de relajación, meditación, yoga, anclajes, patentizar nuevas creencias en voz alta o por escrito, cambiar algún actividad simple de nuestros hábitos, etc.


domingo, 1 de marzo de 2015

Amar la sombra.


El gran médico y psicólogo Carl Jung habla en sus ensayos y estudios de la sombra, la que habita en nosotros y en la realidad en la que vivimos y construimos. Aquí la entenderemos como los impulsos y realidad del subconsciente y su confusa, compleja y rápida dinámica, como la presencia del otro, de ese yo de la trastienda, tras cortinajes, que tanto nos determina y condiciona.
Lo que rechazamos de nuestro comportamiento, por sí mismo y por el auto sabotaje que crea, se desactiva con la aceptación afectuosa del mismo impulso.  En efecto, se toma conciencia y se evita el auto rechazo,  que actúa como combustible. Incluso la causa que programó dichas creencias se puede ver mitigada por tal aceptación.
Ahora bien, ¿cómo aceptar y sentir afecto por aquello que nos obstaculiza? Como en el blog está expuesto existe la posibilidad de una medida consciente de acoger esos comportamientos, pero también concurre la necesidad de aceptar subconscientemente -a través del método aquí expuesto u otros- dichos impulsos y, por tanto, desactivar parte de su acción y el sufrimiento consiguiente.

domingo, 8 de febrero de 2015

La lentitud.

En el libro "Elogio de la lentitud" Carl Honoré nos plantea no solo los beneficios de la calma a la hora de afrontar y manejar lo cotidiano, sino cómo durante los últimos ciento cincuenta años cualquier actividad, por nimia que sea, se ha vuelto más frenética y, por tanto, insoportable.
La Naturaleza es parsimoniosa. Los cambios estacionales son lentos, las tormentas se gestan durante horas y la edad adulta llega a un ritmo tenue. También, como refiere el gran pintor y arquitecto austríaco Friedensreich Hundertwasser, la Naturaleza odia la línea recta. Los cambios no son en absoluto lineales ni uniformemente acelerados. En efecto, la llegada de las estaciones no supone un progresivo incremento o descenso térmico y a veces la adolescencia tiene pequeños retrocesos.
Cabe preguntarse por qué nuestra sociedad es más frenética cada vez, por qué se ve como algo normal y cotidiano vivir estresado, atareado e, incluso, agotado. Posiblemente vivamos en un entorno social en el que el hombre no está considerado como tal, sino como un engranaje de un sistema productivo cuyos beneficios solo alcanza, en el mejor de los casos, a rozar y, como tal herramienta, su  autoestima está cifrada en términos de utilidad productiva, y, por tanto, carece de autonomía, autoconocimiento y autenticidad. Para ello los ideales sociales, como potentísima agencia educativa, usan el consumismo, el materialismo y la cosificación como utensilios de dominio, e inducen a la persona a ser producto de consumo y herramienta de producción.
En este devastador contexto la alienación y, como consecuencia, la angustia se empiezan a apoderar del ser humano y se ve compelido a consumir medicación peligrosa, per se y por ser adictiva. Y las cifras ya empiezan a ser alarmantes.
Todo camino o técnica, y la expuesta en el blog está en esa línea, deben llevar al ser humano a armonizarse consigo mismo y con el entorno, ser dueño de su propia vida. A partir de ahí la lentitud y la riqueza vendrán de forma consecuente.

domingo, 1 de febrero de 2015

Novedades en el blog.

Desde el pasado mes de diciembre hasta la fecha he estado preparando en formato de libro el contenido del blog, esto es, el método y sus fundamentos y aplicaciones. Cuando dicho texto libro esté preparado será enlazado en formato pdf a través de Issuu para que pueda leerse con tranquilidad. El mencionado texto será básicamente lo aquí tratado. 
Mientras se completa el proceso arriba mencionado se irán planteando reflexiones acerca del método y distintas aplicaciones del mismo.

domingo, 18 de enero de 2015

En cinco pasos

Resumiendo de manera práctica todo lo expuesto en el blog:

1. Postura: coherencia entre hemisferios a través de unir las manos y cruzar pies, armonía cinestésica mediante una actitud tónico postural equilibrada, relajación y concentración previas, solicitar permiso al subconsciente y formular el propósito hasta sentir la aceptación, integrar esa sensación con unión de manos.

2. Propósitos: en función de qué necesitamos definimos afirmaciones positivas y podemos testar -si lo consideramos necesario- después de las sesiones si el subconsciente los ha aceptado. Conforme se van integrando dichos propósitos vamos descubriendo otros nuevos.

3. Ir paso a paso, trabajando un par de días o tres cada propósito y practicando todos los días una o dos veces.

4. Reforzar lo que hemos hecho usando de vez en cuando propósitos de refuerzo como "todo lo conseguido se afianza en mí cada día más".

5. El tiempo corre a nuestro favor, esto es, una vez integrado el propósito con el paso del tiempo se va haciendo más fuerte en nosotros.

domingo, 11 de enero de 2015

Aplicaciones del método.

Ya vimos en una anterior entrada la aplicación del método para meditar o, cuanto menos, facilitar la meditación.
Igualmente este método puede transferirse o directamente utilizarse para fines complementarios como:
1. Relajarnos: podemos usar el Relajamiento Diferencial o el Entrenamiento Autógeno en una postura de coherencia kinestésica y, a partir de ahí, solicitar permiso al subconsciente y realizar los pasos correspondientes.
2. Crear anclajes.
3. Trabajo intelectual (comprender, memorizar, transferir...) a través del anclaje o la postura de equilibrio kinestésico durante el estudio/ lectura.

sábado, 3 de enero de 2015

El crecimiento: un camino sin meta.

El ser humano está abierto toda la vida al aprendizaje, a su perfección y construcción, no está hecho y se debe recrear. Ese camino es la vida y realmente es necesario asumir al empezar a trabajar en nosotros mismos que, aunque las mejoras sean progresivas y significativas, siempre estamos creciendo y construyéndonos, y que dicha labor nos mejora en ese flujo natural para toda la vida. Por ello, la estabilidad no debe ser entendida como un estado de madurez permanente, en el que estar toda la vida, sino una consciencia de un avance perfectivo constante, adaptado, en el que todos los obstáculos propios y los sufrimientos generados por nuestra programación han sido superados.