El cambio en la reprogramación de nuestro subconsciente conlleva un nuevo hábito y es este la siguiente pieza clave para que dicho cambio se integre y nuestra personalidad se optimice. Por ello, el cambio trae el nuevo hábito, y el hábito fortalece el cambio.
La transformación puede ser inmediata o a muy corto plazo, pero, a veces, precisa de mucho tiempo, ya que se inicia una modificación de la estructura de creencias del subconsciente que repercute en pequeños hábitos hasta que aparece el cambio deseado, como el florecimiento de lo sembrado. Perséfone regresa, pues, tras pasar por el Hades y con ella retorna la vida, nace lo nuevo y todo es luminoso y diferente.